Tortuga carbonaria

La tortuga carbonaria (Chelonoidis carbonaria), es una especie de tortuga terrestre que habita en América del Sur, desde Venezuela hasta Brasil. Otros nombres que recibe es tortuga de patas rojas o tortuga morrocoy.  Esta tortuga es un animal fascinante y ha sido objeto de estudio durante muchos años debido a su tamaño, su longevidad y su papel en los ecosistemas. Este género de Chelonoidis se compone de seis especies, siendo la más reconocida la tortuga carbonaria. Aunque no se han identificado subespecies, hay una gran variabilidad en cuanto a tamaño y coloración entre las diferentes poblaciones que habitan en distintas regiones.

Cabe destacar que hasta hace poco, la Chelonoidis carbonaria se clasificaba en el género Geochelone.

Distribución

Es una especie de tortuga terrestre que se encuentra en los bosques tropicales de Sudamérica, principalmente en países como Guayana, Venezuela, Brasil, Ecuador y Paraguay. También se pueden encontrar poblaciones en algunas islas del Caribe, aunque estas poblaciones son introducidas por el ser humano.

Suelen habitar en zonas de bosque húmedo y selva tropical, aunque también se pueden encontrar en zonas más secas y sabanas. Trepan a los árboles para tomar el sol o refugiarse de los depredadores.

Características

Es una tortuga terrestre de tamaño mediano a grande, de forma oblonga y cilíndrica, con espaldar angosto y alargado. Tiene patas largas que le permiten atravesar fácilmente zonas lodosas o pequeños humedales.

Su color general es oscuro con manchas claras cuadrangulares en las areolas y puntos luminosos en las patas delanteras. Su cabeza es grande con un hocico puntiagudo y una coloración negruzca salpicada de escamas luminosas amarillas a anaranjadas.

Presenta anillos de crecimiento muy marcados. La especie presenta una forma de "bobina" más estrecha en el centro y manchas rojas en las patas delanteras y a veces en la cabeza. El dimorfismo sexual es pronunciado.

Hábitos

La especie habita en entornos más secos y abiertos. Suele ser más activa por la mañana y por la tarde, y durante los meses más cálidos se esconde bajo la vegetación y puede permanecer inmóvil sin alimentarse durante días. Cuando se mueve, recorre grandes distancias para encontrar lugares de alimentación específicos, como áreas donde caen frutos en ciertos periodos del año.

¿Cuánto vive una tortuga carbonaria?

Esta especie de tortugas pueden llegar a vivir más de 60 años en cautividad.

¿Qué tamaño tiene la tortuga carbonaria?

La tortuga carbonaria pueden alcanzar un tamaño los 50 cm, lo más habitual es que midan unos 35 cm. Presenta una gran variación en cuanto a su tamaño dentro de la misma especie y entre poblaciones de distintas regiones. Se han registrado poblaciones de algunas zonas que son bastante mayores que el resto, alcanzando los 70 cm de longitud. Esta variabilidad en el tamaño puede estar influenciada por factores ambientales como la disponibilidad de alimento y las condiciones climáticas, así como por factores genéticos y de adaptación a distintos hábitats.

Cuidados tortuga carbonaria

Si se proporciona el cuidado adecuado, la especie de tortuga en cuestión puede ser muy resistente.

El terrario tiene que ser amplio con calefacción y una humedad adecuada. El sustrato debe ser de buena calidad, se recomienda una mezcla de turba y fibra de coco, y se deben incluir plantas, escondites y un recipiente con agua. El ambiente debe ser humidificado diariamente para mantener la humedad recomendada del 80%. Si la humedad es demasiado baja, las tortugas pueden experimentar lagrimeo en los ojos.

Es ideal mantener la temperatura entre 23 y 28º C durante todo el año, aunque se permite una ligera disminución durante la noche, pero nunca menos de 21º C.

Durante el verano, se pueden mantener al aire libre en las semanas más cálidas, siempre y cuando haya sombra adecuada y humedad relativa alta. Algunos cuidadores optan por mantener estas tortugas en invernaderos con control de temperatura, lo que produce excelentes resultados.

¿Qué comen las tortuga carbonaria?

Esta tortuga suele tener más tendencia herbívora aunque también come alimento animal. En la naturaleza se alimenta principalmente de vegetales, frutos caídos y, en ocasiones, puede comer heces y carne. En la Guayana, también consume larvas, animales muertos, termitas y grandes escolopendras.

La alimentación que se le puede dar en cautiverio debe aportar mayormente de plantas silvestres, verduras y fruta como diente de león, jaramago, lechuga, coles, la higo, la manzana, la pera, el melón, la patilla, la lechosa, el mango y las fresas, y en menor cantidad proteína que debe incluir algo de carne, insectos y moluscos. En la parte del aporte de las proteínas se pueden alimentar con piensos especializados para tortugas o para gatos.

La dieta debe ser variada y hay que añadir calcio de vez en cuando.

¿Cuántas veces al día debe comer un morrocoy?

Las necesidades alimenticias de las tortugas varían según su edad. Cuando son pequeñas, tienen que comer una vez al día, ya que necesitan una gran cantidad de alimento para crecer y desarrollarse adecuadamente. A medida que van creciendo, su metabolismo se ralentiza y su necesidad de alimento disminuye. Cuando son jóvenes, lo habitual es que coman cada dos días, mientras que cuando están en edad adulta, suelen comer dos veces por semana.

Reproducción

La cópula de la especie es muy animada, con el macho moviendo violentamente la cabeza de abajo a arriba y la hembra a veces respondiendo con movimientos similares. Después de oler la cloaca y morder las patas, se produce la cópula.

La hembra puede poner hasta cuatro puestas por temporada, cada una con alrededor de diez huevos alargados que pesan unos 40 gramos.

La construcción de los nidos para las puestas no siempre es fácil debido al entorno húmedo y detrítico. Los huevos tienen una incubación de tres a seis meses, dependiendo de las condiciones de humedad y exposición solar del lugar.

Las crías pesan alrededor de treinta gramos al nacer.

Para incubar los huevos correctamente se requiere una temperatura constante de 29º C y una humedad del 80 %.

Historia

Históricamente tiene una larga relación con los seres humanos, siendo consumida frecuentemente por poblaciones indígenas y colonos europeos en el pasado esta tortuga de tierra carbonaria. Fue introducida en Europa en el siglo XVII y se encontraba en pequeños zoológicos y colecciones curiosas. Los indígenas la consideran muy sabrosa y la cocinan a la brasa. Durante la Semana Santa en Brasil, se recolectan para su consumo ya que se consideran "carne de vigilia". Para capturarlas, se utilizaba un método común que consiste en fijar pequeñas ramas delante de su cabeza y detrás de su cola con finas lianas.

Estado de conservación

La tortuga carbonaria está en peligro de extinción y está protegida por el CITES. La principal amenaza es la caza excesiva y la exportación para el comercio de mascotas. La pérdida de hábitat y la agricultura también son una amenaza. Se están realizando esfuerzos de conservación, como la protección de reservas naturales y parques nacionales.

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